Ley Antitabaco

El otro día leí una noticia que decía que el próximo Presidente del Gobierno, D. Mariano Rajoy, tiene entre sus planes retocar la ley del tabaco recientemente aprobada para flexibilizarla. Me gustaría, si pudiese, pedirle al Sr. Rajoy que no cambie una de las mejores leyes, desde el punto de vista sanitario, que se han aprobado en décadas y que probablemente va a prevenir muchas muertes prematuras en los próximos años.  No quiero entrar en debates políticos. Comprendo que dicha Ley ha podido causar serios problemas al sector de la hostelería que, en medio de la crisis general que vivimos, ha visto cómo un porcentaje nada desdeñable de su clientela ha dejado de consumir en sus establecimientos por la prohibición de fumar. También entiendo que la Ley actualmente en vigor siguió a otra aprobada poco antes que obligaba a los hosteleros a invertir sumas importantes de dinero para separar zonas para fumadores y para no fumadores. Con la nueva Ley esta separación quedó obsoleta haciendo que la inversión no sirviera para nada.

Todo esto, y es posible que me puedan dar mil razones más, es comprensible y quizás debe de tenerse en cuenta a la hora de llegar a acuerdos de compensación con los hosteleros y con los estanqueros. Pero si hablamos estrictamente desde el punto de vista médico, y es lo que quiero hacer, la Ley es buena y protege a la población. Aquí también se me dirá que los gobiernos no deben proteger a los ciudadanos si ello menoscaba su libertad. Tampoco voy a discutirlo. Sólo puedo afirmar que esta Ley ha conseguido que en Guipuzcoa, por ejemplo, disminuya la venta de tabaco en un 15% (noticia publicada en el Diario Vasco del 21/11/2011). Si tenemos en cuenta que el tabaco es la causa de 3 de las 4 enfermedades que causan más muertes prematuras en la población, entonces es fácil entender cómo esta reducción es positiva. Y para que se hagan una idea, estas 3 enfermedades (infarto de miocardio, EPOC y cáncer de pulmón), causan en España unas 100.000 muertes al año, 30 veces más que los accidentes de tráfico.

No me cabe ninguna duda que la reducción en un 15% en el consumo de tabaco visto en Guipuzcoa será mayor según pase el tiempo por el efecto de contagio. En las consultas médicas han aumentado considerablemente las preguntas acerca de los tratamientos para la deshabituación tabáquica. España es de los países con tasas de tabaquismo más elevadas. En países como en los EE.UU hace 20 años que empezó el descenso en el porcentaje de adultos que fuman lo que se ha traducido en una disminución progresiva del número de muertes por las enfermedades antes mencionadas.

Espero que el Sr. Rajoy tenga todo esto en cuenta a la hora de poner en marcha su programa en temas de salud pública y deje como está una muy buena Ley.

Pánico al bisturí

Ayer a estas horas entraba en un sueño profundo inducido por la anestesia que con mimo me administraba la Dra. Paula Duque, para que el Dr. Gonzalo Mora me pusiera en orden mi maltrecha rodilla. No han pasado 24 horas y estoy en casa escribiendo estas líneas. 


Hace muchos años, con 16, me intervinieron los dos tobillos por problemas de ligamentos. El recuerdo de las primeras 24 horas tras la cirugía no se me olvidará nunca por el intenso dolor, las náuseas y los vómitos. El resultado de aquella cirugía fue magnifico, pero prometí que nunca más entraría a un quirófano para una cirugía electiva. 


Pues bien, queda incumplida mi promesa, y me alegro de ello. Al despertar ayer sentí una ligera molestia en la rodilla, pero en seguida me pusieron una perfusión endovenosa continua de analgésicos, con algún opiáceo en el cocktail, y no volví a sentir ningún dolor, ni tan siquiera molestia. A las 6 horas del "cierre de suturas", que así es como me lo dijo la enfermera, sonando más a azafata preparando el avión para despegar, me sirvieron la primera comida desde la medianoche anterior. Y me la comí como si se fuera a acabar el mundo. De hecho rogué que me subieran algo más porque el consomé y el yogur me supieron a poco. El sandwich mixto que siguió no tenía nada que envidiar al chuletón de buey que intenté que me sirvieran, solicitud que con buen criterio fue ignorada.


En definitiva, quiero con esta entrada ayudar a superar el pánico al bisturí a quien tenga una cirugía programada, o a quien esté evitando tomar la decisión de someterse a una intervención. Obviamente no hay que tomarse estas cosas a la ligera, pero con los avances en la anestesia y en el control del dolor, merece la pena si la cirugía va a aportar beneficios claros.


Por último, no quiero dejar de dar las gracias a los dos equipos médicos dirigidos con maestría por la Dra. Duque y el Dr. Mora, y un agradecimiento muy especial a las enfermeras, auxiliares y personal administrativo de la Clínica Universidad de Navarra, que hacen que una experiencia traumática se supere tan fácilmente.

Tos Crónica

La tos crónica es una de las causas más frecuentes de visita al médico. Se define como tos persistente de más de 3 semanas de duración y hay que distinguirla de la tos aguda producida por infecciones respiratorias, es decir, por los catarros comunes, en cuyo caso no suele durar más de 7 -10 días.
Es un síntoma que provoca mucha preocupación porque se suele identificar con cáncer de pulmón o con enfermedades infecciosas como la tuberculosis. Afortunadamente, la gran mayoría de las causas de tos crónica no son neoplásicas (cáncer) ni están causadas por infecciones. Aún así existe mucha confusión, incluso entre los médicos. No es infrecuente que un paciente acuda al especialista de Neumología tras haber recibido durante semanas o meses tratamientos diversos que incluyen múltiples járabes, mucolíticos, antibióticos, e inlcuso tratamientos “naturales” como la cebolla partida debajo de la cama o en la mesilla de noche, o hierbas recomendadas en el herbolario.
Cuando vemos en la consulta a un paciente con tos crónica, lo primero que nos interesa saber es si es fumador porque el tabaco es la causa más común. Dejar de fumar resuelve el problema en la gran mayoría de los casos. Si el paciente no es fumador repasamos la medicación que está tomando porque hay algunos fármacos que producen tos como efecto secundario. Los más comunes son anti-hiperetensivos de la familia de los IECAS o inhibidores de la ECA (Enzima Convertidora de la Angiotensina). Enalapril, captopril y, en general, cualquier medicamento con la terminación “pril” pertenecen a esta familia. Basta con cambiar el tratamiento de la hipertensión para que la tos desaparezca.
Una vez que hemos descartado el tabaco y los medicamentos como causas, el 95% de las veces la tos está producida por una de las 3 enfermedades siguientes: asma, reflujo gastroesofágico y goteo retronasal o postanasal.
El asma es una enfermedad muy común y conocida. Pero no es tan conocido que puede manifestarse solamente con tos persistente. No es necesario que produzca sibilancias (“pitidos” al respirar) ni disnea (dificultad respiratoria), síntomas más típicos.
El reflujo gastroesofágico no es menos común y se caracteriza por la incompetencia del esfínter entre el estómago y el esófago, lo cual permite que el ácido que se produce en aquél, ascienda por el esófago, llegando en ocasiones hasta la boca. La causa más común es la hernia de hiato, pero puede producirse sin que que haya una hernia. Generalente, aunque no siempre, se acompaña de sensación de ardor en el pecho, por detrás del esternón. Igual que ocurre con el asma, la tos puede ser la única manifestación del reflujo gastroesofágico.
El goteo retronasal es la caída de secreciones de la nariz o de los senos paranasales a la faringe. Suele ocurrir en individuos con sinusitis crónica o con rinorrea (secreción nasal) persistente. Suele producir también congestión nasal y alteraciones del olfato. El paciente describe una sensación de tener algo en la graganta que le obliga a tragar continuamente. Una vez más, la tos puede ser la única manifestación de este problema.
En resumen, la gran mayoría de las causas de tos crónica son sencillas de tratar y no son graves, pero no mejoran con jarabes, antibióticos ni con una cebolla en la mesilla de noche.

Sarcoidosis

Es una enfermedad más común de lo que pueda parecer por la rareza de su nombre. Su causa es desconocida. No es una enfermedad hereditaria, aunque sí hay casos de familias en las que se da más de una caso, lo que sugiere que debe haber factores genéticos que favorecen el desarrollo de la enfermedad.

Es una enfermedad inflamatoria, no tumoral, con un pronóstico generalmente muy bueno. Por causas desconocidas se produce una reacción inflamatoria que en términos médicos se llama GRANULOMATOSA. Consiste en la formación de pequeñas acumulaciones esféricas de células inflamatorias en los tejidos afectados. Estas acumulaciones de células son las que van a producir los síntomas y los signos de la enfermedad.

La sarcoidosis puede afectar cualquier órgano del cuerpo, aunque lo más común es que afecte los ganglios linfáticos, sobre todo los situados en la cavidad torácica, y los pulmones. Cuando solo afecta los ganglios linfáticos, que por cierto es la forma más común de la enfermedad, no produce ningún síntoma. En este caso la enfermedad se suele diagnosticar por casualidad al hacer una radiografía de tórax y ver que los ganglios linfáticos junto a los pulmones son más grandes de lo normal. Esto es lo que se conoce como ADENOPATÍAS. En este tipo de Sarcoidosis no es preciso administrar ningún tipo de tratamiento.

Además de los ganglios, puede producirse inflamación granulomatosa en los pulmones y otros órganos. Dependiendo del órgano afectado y de la intensidad de la inflamación, aparecerán las diferentes manifestaciones de la enfermedad.

El segundo órgano más frecuentemente afectado después de los ganglios, es el pulmón. La inflamación del pulmón se puede ver en una radiografía de tórax y da lugar a dificultad respiratoria y tos. Estos síntomas pueden acompañarse de otros síntomas como fiebre, malestar general y sensación de cansancio.

La piel puede afectarse con lesiones de diferentes características. En los ojos se puede producir desde una conjuntivitis hasta pérdida de visión por inflamación de la retina. Afortunadamente, la inflamación ocular, al igual que la cardiaca y neurológica, es menos frecuente.

El DIAGNÓSTICO de la sarcoidosis se suele sospechar con la presentación clínica y con una simple radiografía de tórax. No obstante, al haber presentaciones muy variadas y no tan comunes, es preciso hacer otras pruebas diagnósticas. La más importantes suele ser, además de unos análisis de sangre, un TAC (escáner) de tórax y abdomen. Aunque el diagnóstico se puede sopechar con estas pruebas, es necesario en una gran mayoría de las ocasiones obtener tejido mediante una biopsia de uno de los órganos afectados. Las biopsias se pueden obtener por vías diferentes y con técnicas diversas. Puesto que la enfermedad afecta sobre todo a pulmones y ganglios de la cavidad torácica, quizás la prueba más frecuentemente utilizada para obtener una biopsia sea LA BRONCOSCOPIA. Esta prueba consiste en introducir por la vía aérea superior (nariz o cavidad oral) un tubo fino con luz y cámara de vídeo en el extremo, hasta las vías aéreas inferiores (bronquios). Aquí se pueden obtener biopsias de los ganglios que están junto a la traquea y los bronquios, o del mismo pulmón.

El TRATAMIENTO consiste fundamentalmente en el antiiflamatorio más potente que existe, que es la cortisona. Pero como el tratamiento tiene efectos secundarios importantes y la enfermedad, en general, tiene un buen pronóstico sin tratamiento alguno, solo se recurre a la cortisona cuando le enfermedad afecta a órganos vitales (ojos, corazón, sistema nervioso), o cuando la afectación de otros órganos es muy severa (pulmones, hígado, etc).

El PRONÓSTICO es muy bueno en la gran mayoría de los pacientes. En un 70% de los casos aproximadamente, la enfermedad se resuelve espontaneamente sin tratamiento alguno. En el resto es preciso tratar con buena respuesta en la mayoría.

EPOC, enfisema

La EPOC, o enfermedad pulmonar obstructiva crónica, es una de las causas más frecuentes de muerte prematura, pero también es de las enfermedades más desconocidas por el público en general. Como las demás enfermedades que lideran la clasificación de causas más frecuentes de muerte (es decir, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer de pulmón), la EPOC está causada por el consumo de cigarrillos. En países asiáticos y, en menor medida, en Occidente, hay un porcentaje pequeño de pacientes con EPOC que nunca han fumado y que deben su enfermedad a alguna anormalidad genética, a asma severo persistente o a la exposición a tóxicos inhalados medioambientales (humo de leña, carbón etc).
En esta enfermedad se produce una obstrucción progresiva del árbol bronquial resultando en una dificultad respiratoria que va empeorando con el tiempo. En pacientes con un grado severo de la enfermedad el intercambio de oxígeno entre el aire respirado y la sangre se encuentra muy limitado, llegando a situaciones nada infrecuentes en las que se necesita tratamiento con oxígeno suplementario para sobrevivir.
La EPOC se puede manifestar de dos formas. Una en el que la alteración principal se encuentra en los bronquios, causando tos y expectoración crónicas. Este cuadro se denomina bronquitis crónica. El otro tipo de EPOC es el enfisema. A diferencia de la bronquitis crónica, el daño no se produce en los bronquios sino directamente en los alveolos pulmonares. Éstos, que son como celdillas de un panal de abejas, se van destruyendo generándose celdas más grandes y menos eficaces en su función principal (poner en contacto el aire inspirado con la sangre de los capilares para que se produzca el intercambio de oxígeno). Aunque no dañe los bronquios, también causa obstrucción en ellos. Esto es debido a que los bronquios se mantienen abiertos gracias a las fuerzas elásticas del tejido pulmonar que tira hacia fuera de sus paredes. Al destruirse el tejido pulmonar, se reducen estas fuerzas elásticas y, como consecuencia, se cierran los bronquios.
Sólo existe una forma de prevenir la enfermedad: evitar la exposición al humo del tabaco. Una vez establecida la EPOC, seguir fumando es como echar gasolina al fuego. La enfermedad avanza inexorablemente. Un problema a tener en cuenta es que, como tenemos más tejido pulmonar del que necesitamos para llevar una vida normal, hasta que no se reduce la función de forma muy significativa un fuamdor puede que no lo note. Y cuando comienzan a manifestarse los síntomas puede ser ya tarde. Desgraciadamente, un porcentaje considerable de pacientes con EPOC ven como su enfermedad progresa pese a abandonar el hábito tabáquico.
Acabo con un dato adicional importante. Tener EPOC, y más aún si es del tipo enfisema, aumenta considerablemente el riesgo de padecer un cáncer de pulmón.

Dejar de Fumar: 10 buenas razones

Fumar. Porque dejarlo.


1.- Evitar sustancias tóxicas: Cuando una persona deja de fumar deja de inhalar en cada calada más de 3.000 sustancias tóxicas, la mayoría cancerígenas.
2.- Disminuir el riesgo de infarto: Al dejar de fumar el riesgo de padecer un infarto de miocardio se reduce de forma drástica. Tanto es así que al cabo de un año tiene el mismo riesgo que el de una persona que no haya fumado nunca.
3.- Mejor aporte de oxígeno: Horas después de dejar de fumar disminuye la concentración de monóxido de carbono en la sangre para terminar desapareciendo. De este modo aumenta la capacidad de transporte de oxígeno de los glóbulos rojos.
4.- Disminución de riesgos en niños. En una familia con padres fumadores, si estos dejan de fumar se reducen a cero los riesgos que puedan tener sus hijos como consecuencia de haber inhalado de forma pasiva el humo durante la infancia.
5.- Reducción del riesgo de cáncer de pulmón. Aunque lentamente, el riesgo de padecer cáncer de pulmón disminuye a partir del primer día de haber dejado de fumar.
6.- Detención de enfermedades pulmonares. Cuando una persona fumadora padece una enfermedad pulmonar, del tipo de la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), al dejar de fumar consigue detener el avance de la enfermedad. Si no tiene la enfermedad evita desarrollarla.
7.- Mejora de la salud de la piel. A los pocos días de haber dejado de fumar puede observarse una mejora del aspecto y de la salud de la piel. El tabaco acelera mucho el envejecimiento natural de la piel.
8.- Menor riesgo de numerosas enfermedades importantes. Además de las enfermedades cardiovasculares, la enfermedad obstructiva crónica y el cáncer de pulmón, abandonar el hábito tabáquico disminuye el riesgo de padecer otras enfermedades como la fibrosis pulmonar o los cánceres de esófago, de lengua y de vejiga.
9.- Mayor rendimiento deportivo. Puesto que rápidamente aumenta la capacidad de la sangre de transportar oxígeno, el rendimiento deportivo mejora a los pocos días de dejar de fumar.
10.- Ahorro económico. Para una persona que fume un paquete de cigarrillos diario, dejar de fumar puede suponerle un ahorro anual de entre 1.500 a 2.000 euros.

Cáncer – La clave es la detección precoz

En el pasado mes de junio se han publicado dos trabajos de investigación importantes que señalan la dirección a seguir para combatir con éxito el cáncer. Uno, publicado en el New England Journal of Medicine, la revista médica más prestigiosa, cierra definitivamente la discusión acerca de si la mortalidad por el cáncer de pulmón, el cáncer más mortífero de todos, se puede reducir con un programa de detección precoz similar al del cáncer de mama. El otro, publicado en la revista Radiology, revista de la Sociedad de Radiología de Norte América (RSNA), y centrado precisamente en el cáncer de mama, demuestra que cuantos más años se hagan mamografías las mujeres, más muertes por esta enfermedad se evitan.

Puede parecer sorprendente que afirme que estos descubrimientos son de suma importancia. Pensarán muchos que todo esto es lógico y que “menudos descubrimientos”. No se pueden ni imaginar el debate científico que hay al respecto.

Para que se hagan una idea de la importancia del trabajo sobre la detección precoz del
cáncer de pulmón, el pronóstico de este cáncer hoy, después de billones de euros invertidos en investigación, es idéntico al de hace 40 años. Si uno tiene la desgracia de padecer esta enfermedad, tiene menos de un 15% de probabilidades de vivir 5 años. O lo que es lo mismo, la mortalidad por cáncer de pulmón es cercana al 100% en poco tiempo.

En el estudio
NLST (National Lung Screening Trial), publicado hace una semana, se ha demostrado que haciendo un escáner del pulmón (TAC o tomografía axial computarizada) anualmente durante 3 años a fumadores o exfumadores de 55-74 años de edad, se consigue reducir la mortalidad por cáncer de pulmón en un 20%. Nunca en la historia de esta enfermedad se había descubierto tratamiento alguno que redujese así la mortalidad. Y cabe destacar que en este estudio tan sólo se hicieron TAC anuales durante 3 años. Es más que probable que estos resultados mejorarán considerablemente cuando, en lugar de 3 años, los sujetos de alto riesgo se hagan esta prueba anualmente durante 10 ó 15 años.

El segundo estudio mencionado aborda precisamente este punto. Demuestra que cuantos más años se haga mamografías una mujer, mayor es la probabilidad de que se reduzca su riesgo de morir por cáncer de mama. Pese a que hay numerosos estudios que han demostrado que los programas de detección precoz mediante mamografía son efectivos, el debate no ha cesado. Afortunadamente, y pese a las opiniones contrarias, la mayoría de los gobiernos y asociaciones médicas apoyan estos programas, aunque en algunos países, como en los EE.UU., se acaban de aprobar recomendaciones más estrictas que limitan el acceso a las mamografías a mujeres más jóvenes.



En este sentido cabe destacar el programa puesto en marcha en Navarra hace ya más de 20 años y que dirige la Dra. Nieves Ascunce. Recientemente se ha sabido que la mortalidad por cáncer de mama en Navarra ha empezado a disminuir de forma significativa. Hay otros factores que pueden determinar este descenso, pero uno clave es la detección precoz. Y es importante destacar que no se empezaron a ver los resultados positivos hasta que no pasaron 14-15 años desde el inicio del programa.


Algunos plantean la necesidad de obtener aún más datos para iniciar programas de
detección precoz de cáncer de pulmón pero, en mi opinión, las autoridades sanitarias no tienen más remedio que analizar estos datos con lupa, y actuar ya. Según los resultados publicados, no es ético hacer, o siquiera plantear, otro estudio en el que a un grupo de riesgo no se le ofrezca la prueba de detección precoz para que sirva de grupo control con el que se pueda comparar otro grupo de personas a los que sí se les ofrezcan las pruebas. Sabiendo ya que dichas pruebas reducen la mortalidad, ningún Comité Ético de Investigación puede aprobar una investigación de estas características.

Además de potenciar los programas de detección de cáncer de mama ya existentes, las autoridades deben plantear nuevos programas de detección precoz de cáncer de pulmón mediante TAC de tórax. Y no quiero entrar aquí en los programas de detección precoz de cáncer de colon mediante colonoscopia u otras pruebas también eficaces, aunque también merecen atención.



Quizás todo esto pueda parecer un gasto innecesario en los tiempos que corren, pero creo que cualquier análisis serio determinaría rápidamente que supone más una inversión de futuro que un gasto. Lo que es verdaderamente caro es tratar un cáncer avanzado. Además, si mañana se descubriese un medicamento nuevo que redujese la mortalidad por cáncer de pulmón en un 20%, ese medicamento estaría en el mercado al día siguiente, costaría decenas de miles de euros al año por paciente, y nadie lo cuestionaría.

Por supuesto que cualquier esfuerzo en la detección precoz del cáncer tiene que ir acompañado de esfuerzos similares o mayores en la erradicación de los factores de riesgo. En cualquier lucha contra el cáncer de pulmón la primera batalla hay que librarla contra el
tabaquismo. Pero no hay que olvidar, que incluso dejando de fumar, el riesgo de cáncer de pulmón, aunque empieza a disminuir inmediatamente, perdura elevado muchos años, incluso décadas. En otros artículos explicaré detalles acerca de estos estudios y abordaré los debates sobre estos programas.

Ictus, infartos, estilo de vida

La desgracia ha golpeado al portavoz del PSOE Alonso, y desde aquí le deseo lo mejor a él y a su familia. Mi abuela sufrió un ictus en mis brazos cuando yo no pasaba de los 15 años, y esa imagen la tengo grabada para siempre. Luego, como médico, he visto y atendido a cientos de pacientes con accidentes cerebrovasculares (ACV), pero es una enfermedad que nunca dejará de impresionarme.

Un día te levantas y eres una persona capaz, independiente, autónomo y, de pronto, sin esperarlo y sin aviso, una arteria del cerebro se bloquea y, dependiendo de qué arteria es y de qué territorio cerebral irriga, se produce la catastrofe. Mi abuela cayó sobre mí, inmóvil, y sin poder articular más que ruidos incomprensibles. De hecho no pude con ella y cayó al suelo. Medio cuerpo quedó paralizado para siempre y su capacidad de hablar quedó limitada severamente.

Existen muchos tipos de ACV. Si uno tiene suerte podría sufrir un ataque isquémico transitorio (AIT). En este tipo, el bloqueo arterial es temporal y la circulación sanguínea se restablece a tiempo para que el cerebro no sufra daño permanente. Espero que este sea el tipo de ACV que ha sufrido el exministro. Es una especie de aviso. Aviso de que nuestro estilo de vida no es compatible con la salud.

Hipertensión arterial, tabaquismo, dieta, obesidad, colesterol, son todos factores que ponen a uno en peligro. La hipertensión es probablemente la más importante. Además de factores genéticos, fundamentales, el estilo de vida "occidental" (poco ejercicio, dieta hipercalórica y grasa, ingesta de sal elevada, sobrepeso) favorecen la hipertensión. El tabaco añadido favorece la arteriosclerosis, que no es más que el depósito de placas de grasa en las paredes de las arterias que después pueden liberarse y bloquear arterias más pequeñas. El resultado: tapones en las arterias que impiden que el cerebro reciba la sangre necesaria para mantenerse vivo. La región del cerebro que no recibe sangre se necrosa (muere) y las funciones que esa región dirige, desaparecen.

El título de este artículo incluye la palabra "infartos". En definitiva, un infarto es lo que acabo de describir, es decir, la muerte de tejido por falta de riego sanguíneo. No importa en qué órgano ocurre. Si se tapona una arteria coronaria, se produce un infarto de miocardio. Si se tapona una arteria pulmonar, se produce un infarto de una sección del pulmón (afortunadamente no tan grave). Obviamente, las consecuencias no son las mismas en todos los órganos. Un infarto de órganos claves como el cerebro o el corazón tienen consecuencias dramáticas y muchas veces fatales. En casos menos severos, las limitaciones que quedan de por vida no son desdeñables.

La buena noticia es que todo esto puede prevenirse, o por lo menos podemos influir en el grado de riesgo. ¿Cómo? Con ejercicio, dieta sana, tratamiento de la hipertensión y de la hipercolesterolemia, dejando de fumar.... Fácil ¿verdad? Si uno piensa en las ventajas, es menos difícil.

Información y Medicina 2.0

La explosión de las redes sociales está cambiando el día a día de muchas profesiones. Quizás donde más se manifiestan estos cambios es en el periodismo. Recientemente el Director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, usuario de Tweeter desde hace no más de 2 meses más o menos, convocó a 100 tuiteros, entre los que tuve el honor de encontrarme, en la sede de su diario para hablar precisamente de la influencia que están teniendo las redes en nuestras vidas. La mayoría de los asistentes eran periodistas, pero había representantes de muchos grupos diversos, desde la Medicina (servidor) hasta las Fuerzas del Orden Público.
Claramente se pudo ver cómo las redes sociales y, en particular Tweeter, son ya parte del quehacer diario de muchos profesionales de la información. Y para los usuarios, estas nuevas formas de comunicación están suponiendo un cambio drástico en cómo recibimos la información. Las noticias y los análisis son más inmediatos, con las ventajas y los riesgos que ello supone. Por ejemplo, alguien le preguntó a Pedro J. acerca del riesgo que la exigencia de rapidez pueda tener sobre la necesidad de contrastar fuentes, riesgo que según él es real.
En Medicina estamos aún en los inicios de este boom. En los EE.UU. ya hay muchos hospitales y médicos que se aprovechan de estos medios nuevos para comunicarse con sus pacientes. En España este fenómeno se encuentra aún en la más tierna infancia. Varias son las ventajas, pero también hay que destacar los riesgos e inconvenientes.
Por un lado, los pacientes siempre anhelan tener un acceso fácil a su médico o, en su defecto, a un recurso médico que pueda proporcionar ayuda en cualquier momento. Tradicionalmente los médicos hemos establecido barreras y no hemos facilitado este acceso fuera de horas de trabajo. Por ejemplo, es raro que un médico le dé a un paciente su número de teléfono personal. Pero las redes sociales, en mi opinión, proporcionan esa inmediatez a la vez que permiten al médico mantener un control sobre su tiempo de comunicación. Además son medios de comunicación cómodos y directos.
En el lado negativo hay que destacar los riesgos de que pueda violarse la confidencialidad de los pacientes. Por ejemplo, una comunicación pública por Tweeter con un paciente sería intolerable y una clara violación de la ley (penal y deontológica). Pero usar estas redes para mantener una vía abierta siempre y cuando se permitan comunicaciones privadas, podría ser una opción. La pregunta clave es si estas comunicaciones privadas realmente lo son. Yo personalmente lo desconozco.
Un recurso potencialmente útil es el blog. Es una herramienta con la que los profesionales de la salud (enfermeras y médicos) pueden educar e informar a pacientes y a lectores interesados de forma periódica. Aquí también es preciso seguir muy estrictamente los límites de la confidencialidad. Por ejemplo, no sería correcto que un médico comentase la enfermedad de un paciente real, ni siquiera obviando sus datos personales. En los EE.UU. ya ha habido demandas y despidos de médicos por esta razón. Si existe la más mínima posibilidad de que alguien, aunque sólo sea una persona, pueda identificar al paciente, se está cometiendo un grave error y, probablemente, un delito.
En definitiva, el crecimiento exponencial de las redes sociales va a cambiar considerablemente la forma de trabajar de muchos profesionales en todo tipo de campos. El camino será rápido (no hay más que ver cómo crecen los seguidores de algunos periodistas), pero lleno de baches. Habrá que recorrerlo, pero con mucha precaución.
¿Qué opinan? Espero sus opiniones y experiencias.

Cáncer de Pulmón

El cáncer de pulmón es el cáncer que más muertes produce. Causa más muertes que los cánceres de colon, próstata y mama combinados. En el mundo mueren 1.300.000 personas al año por esta enfermedad. En España mueren unas 19.000 personas al año. Está enfermedad se encuentra entre las 4 causas más frecuentes de mortalidad. Curiosamente, 2 de las otras 3 también están relacionadas íntimamente con el consumo de tabaco: las enfermedades cardiovasculares y la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).

Aproximadamente el 95% de los cánceres de pulmón están causados por el tabaco. Obviamente, fumar no es el único factor que interviene en el desarrollo del cáncer. ¿Por qué tan sólo una fracción de fumadores llegan a tener un cáncer de pulmón? Realmente es una incógnita, pero obviamente tienen que jugar un papel importante diversos factores genéticos y medioambientales que hoy por hoy desconocemos.

¿A qué se deben estas estadísticas tan trágicas? Sobre todo a dos factores: 1) la epidemia de tabaquismo y, 2) es un cáncer que no produce síntomas hasta que es muy tarde.

En España fuma aproximadamente el 35% de la población adulta. Aunque este porcentaje está disminuyendo, y lo hará más con la ley del tabaco, es muy preocupante que entre los jóvenes de 15 a 20 años se calcula que más del 50% son fumadores. Y hay que tener en cuenta que el riesgo de padecer un cáncer de pulmón permanece elevado muchos años después de dejar de fumar. No quiere decir esto que no merezca la pena dejarlo porque, aunque es verdad que el riesgo tarda años en igualarse al de las personas que nunca han fumado, sí que empieza a disminuir desde el mismo día en que se abandona el hábito.

El cáncer de pulmón no produce síntomas porque en el pulmón no hay terminaciones nerviosas que causen dolor. Hasta que no invada una estructura ajena al tejido pulmonar, como por ejemplo un bronquio o la pleura, o emita una metástasis a distancia, puede crecer sin manifestarse clínicamente. Y cuando sí produce síntomas se suele encontrar en estadios avanzados en los que la cirugía ya no es curativa.

Atención a estos datos:
- el 85% de los cáncer de pulmón diagnosticados en estadio I o II, los más precoces, son curables mediante cirugía.
- tan sólo el 15% de los pacientes con cáncer de pulmón se diagnostican en estadio I-II, y cuando lo son suele ser porque se ha hecho una radiografía por otras razones y se detecta casualmente.

En la última década se ha avanzado mucho en la investigación sobre la detección precoz del cáncer de pulmón mediante el uso del TAC (tomografía computarizada) o "escáner" de tórax. Un estudio internacional en el que he participado como investigador (estudio I-ELCAP, http://www.ielcap.org/) ha descrito que haciendo un TAC de baja dosis de radiación anual a fumadores de más de 40años, el 85% de los cánceres de pulmón se pueden detectar cuando se encuentran en estadio I. Y lo que es mejor, el 90% de estos cánceres se pueden curar mediante cirugía.

Estén atentos porque en las próximas semanas (o días) se van a publicar los resultados de otro estudio llevado a cabo en los EE.UU. en el que se demuestra que con un TAC anual se reduce el número de muertes por esta enfermedad, confirmando definitivamente la validez de esta técnica diagnóstica.

Una vez publicados estos resultados volveré a abordar el tema con más detalles y con un análisis del futuro en este campo. Sirva como anticipo que, en mi opinión, en 10 años las estadísticas del cáncer de pulmón habrán cambiado drásticamente. Ahora bien, ningún avance en este sentido puede hacernos olvidar la intervención más importante y efectiva en la reducción de las consecuencias de este epidemia: todo fumador debe considerar seriamente dejar de fumar. Además de ahorrarse una muerte por esta enfermedad tan temible y dolorosa, evitarán muertes precoces por un infarto de miocardio o por EPOC.

Hasta dentro de muy poco.




Dejar de Fumar

Un amigo mío bloguero me ha animado a que escriba un blog médico. Además, este amigo es fumador y me ha pedido que le ayude a dejar de fumar. Querido amigo, vaya el segundo post de mi blog por ti. Aunque seas el único que lo lea, si consigo ayudarte algo en el intento, lo consideraré un éxito. Espero que tú me ayudes a mí en esta aventura con tus comentarios y críticas.
Dejar de fumar es difícil, no hay duda, pero es mucho más fácil hoy que hace 25 años. Entonces salía al mercado el primer tratamiento específico para la deshabituación tabáquica, el chicle de nicotina. Hoy disponemos, además de una amplia experiencia en el diseño personalizado de tratamientos, de varios fármacos que han demostrado ser muy superiores a la mera fuerza de voluntad.
El bupropion (Zyntabac) es un antidepresivo que disminuye el “craving”, o deseo incontrolable de fumar (también de comer). En una minoría de personas produce efectos secundarios, pero aquellos que lo toleran obtienen resultados muy buenos. Una de las ventajas que tiene es que evita en gran medida la ganancia de peso que suele producirse al dejar de fumar.
La vareniclina (Champix) bloquea en el cerebro los receptores a los que se une la nicotina inhalada, impidiendo su efecto de estimulación sobre las neuronas. De esta forma el fumador no obtiene los efectos que espera después de cada calada y llega un momento en que el deseo de fumar disminuye considerablemente. Usando esta estrategia durante 3 meses, el fumador se va distanciando de los hábitos que le unían al tabaco, mientras el cuerpo se acostumbra a no necesitar nicotina. Produce muy pocos efectos secundarios y es muy efectivo.
La nicotina en forma de parches o chicles, sustituye al producto del tabaco que causa la adicción del fumador. Los parches se pegan a la piel durante 24 horas y administran una dosis continua de nicotina. Con este método se consiguen unas concentraciones de nicotina en sangre no muy elevadas, pero suficientes para evitar la ansiedad extrema que produce la falta de nicotina. En casos severos, se pueden combinar los chicles con los parches para emular los picos de concentraciones de nicotina que se obtienen con los cigarrillos.
En casos de adicción muy severa se recomienda con frecuencia la combinación de dos o más de estos métodos. Todos los tratamientos suelen durar tres meses, aunque en casos concretos se pueden prolongar más tiempo.
Es curioso como la gente, en general, es reticente a tomar “pastillas” mientras que no se para a pensar ni un segundo en que con cada calada del cigarrillo se inhalan más de 3000 productos químicos, la mayoría cancerígenos. ¿Quién no ha soplado el humo de una calada del cigarrillo a través de una servilleta de papel? Sólo con una calada queda una mancha marrón que asusta. Esa mancha representa una fracción minúscula de lo que se ha quedado en el camino desde la boca hasta los alveolos pulmonares según el humo del cigarrillo recorre las vías aéreas.
No voy a hablar de los efectos negativos del tabaco. Quizás algún día en otro artículo. Sólo quiero animar a quien esté pensando en dejar de fumar a que considere hacerlo con ayuda médica. Está demostrado, tras numerosos estudios con cientos de miles de personas, que con los tratamientos mencionados se consiguen resultados muy superiores que con cualquier otro método. No obstante, es importante estar decidido. Ningún tratamiento aporta fuerza de voluntad, tan necesaria incluso con los medicamentos descritos.
En cuanto a las diferentes terapias alternativas que se ofrecen, como la acupuntura, la hipnosis, algún que otro libro,… no han sido estudiados en ensayos clínicos. Es muy posible que sean efectivos, quizás por efectos placebo asociados a la determinación de un fumador que ha decidido dejarlo. Además, el pago de una tarifa siempre ayuda a tener algo más de disciplina, aunque sólo sea de forma transitoria. No digo nada en contra de estas alternativas. Cuando me preguntan siempre digo que lo importante es hacer el intento. Si unos está más cómodo con un método que con otro, adelante.
Después de un fracaso siempre hay tiempo, si el tabaco no nos lo impide antes, para intentar algún método diferente . Y que no se desanime nadie que fracase en el intento. Está demostrado que tras un fracaso las probabilidades de conseguir abandonar el hábito por completo en el intento siguiente aumentan considerablemente.
Por último, un comentario sobre el precio de los medicamentos (no tengo relación alguna con los laboratorios). Por muy caros que parezcan, mucho más se gasta un fumador en tabaco.
¡Ánimo!

Severiano Ballesteros

Desde hace tiempo estoy pensando en iniciarme en esto de los blogs. He investigado, he leído, he preguntado, pero no me lanzaba. Aún tengo dudas, sobre todo por dos temores: uno, que no interese, y otro, que no tenga tiempo.

Aunque mi blog será profesional y dedicado a la Medicina, mi primer artículo es un pequeño y humilde homenaje a una de las personas que más he admirado en mi vida: Severiano Ballesteros. Con él ha muerto un mito, un grande de verdad, un pionero. España le debe a Seve mucho más de lo que es obvio. Gran parte del desarrollo turístico de los últimos 25 años se ha hecho gracias al golf y a él. Pero a mí eso no me importa tanto. Me interesa su figura como campeón, como líder, como persona.

Seve creció sin muchas facilidades para jugar al golf. Él buscó las oportunidades. Trabajaba llevando la bolsa de palos a socios del Golf de Pedreña, club privado de difícil acceso. Cada momento que tenía libre lo aprovechaba para dar unos golpes a una bola con los palos que tuviese a mano. Por ejemplo, se dedicaba a dar golpes de precisión alrededor de un green con un hierro 3. Para los no iniciados, eso es como usar guantes de boxeo para tirar dardos al centro de una diana. Esto le ayudó a ser, según Tiger Woods, el golfista más creativo que ha jugado este deporte. Su tenacidad y disciplina, junto a su gran inteligencia, hicieron el resto.

En España no fue tan popular. Es más, se le tachaba de antipático. Sin duda era reservado, pero conociendo sus antecedentes, y el hecho de que en su tierra era donde menos reconocimiento encontraba, no era sorprendente. Incluso podía entenderse. Pero era una gran persona.

Permítanme compartir una anécdota personal. Un día nos invitaron a jugar al Club de Pedreña, y mi mujer, a la que no le gusta el golf, y menos aún, que le vean intentando dar infructuosamente a esa maldita bola, accedió sorprendentemente a jugar. Se disponía a dar el primer golpe cuando llegó un coche eléctrico que aparcó junto al Tee de salida donde ella se encontraba. Levantó la vista y vió que a cuatro metros escasos Seve la observaba.

No te vas a quedar allí” le dijo mi mujer a Seve. “Venga mujer, dale a ver qué tal” contestó él. Yo no sabía dónde meterme porque no dudaba que ella lo estaba pasando francamente mal. Hizo un swing y apenas rozó la bola de tal forma que salío en diagonal al Tee de salida, golpeó en una roca de adorno que había a no más de 5 metros, y volvió hacia atrás pasando a un metro de Seve. Este nos miró a todos y dijo, “esto sí que no lo había visto antes”.

Se bajó del coche, se acercó a mi mujer, que sin duda deseaba desaparecer en ese momento, y allí mismo le impartió una clase de golf ante la mirada atónita y envidiosa de todos. Mi mujer golpeó una bola bastante mejor que la primera, Seve aplaudió y se fue con una sonrisa. Ella nunca más jugó al golf, pero la grandeza de este hombre no se le olvidará jamás.

Seve, siempre estarás en nuestro corazón. Desgraciadamente ahora sí que recibirás el reconocimiento que merecías en vida, pero más vale. Por mi parte, sólo he lamentado que después de racinguista fueras culé y no merengue. Hoy, cuando se celebre el funeral por tí, Pedreña será la capital mundial del golf. Luego, esta tarde, estoy convencido de que, allá donde estés, harás tu característico gesto del puño cuando tu amado Barça se proclame campeón de liga, como si hubieses ganado tú otro grande, otra chaqueta verde.

Gracias y hasta siempre.